sábado, 11 de abril de 2009

Hardig, Arama, Cruz Verde y la Efedrina

Cruz Verde ahora aparece conectada con el laboratorio ARAMA donde se encontraron inusuales cantidades de Efedrina supuestamente utilizada por los carteles narcos de México. La compra incial se habría realizado por droguerias Munich y posteriormente traspasado a ARAMA, la primera parte del Holding de Cruz Verde y de Guillermo Hardig y Cia.

Cruz Verde, controlada por la familia Harding, está atravesando uno de sus peores momentos, puesto que se expone a una multa de unos $15 millones por la colusión, a un desprestigio generalizado e incluso a atentados durante los últimos días.

Sin embargo, el holding está siendo salpicado por otro caso que también tiene ribetes de escándalo: el desvío de unos mil kilos de efedrina presuntamente destinados al narcotráfico internacional.

El pasado 24 de marzo –cuando ya se había desatado el escándalo por el llamado “Caso Farmacias”- era detenido Gerardo Arama Benadretti, propietario del Laboratorio Arama. En dicho laboratorio, ubicado en la comuna de Recoleta, en la capital, habían sido decomisados unos 1.100 kilos de efedrina. Lo llamativo es que esta pequeña compañía farmacéutica históricamente se ha dedicado a la elaboración de productos naturales e incluso homeopáticos, por lo que nunca había utilizado la efedrina en sus preparaciones.

Por eso que la policía consideró que este decomiso –avaluado en unos U$13 millones – no tenía otro destino que el narcotráfico internacional, específicamente los carteles mexicanos, hecho que quedó al descubierto luego que se revelara que hubo grabaciones de contactos telefónicos que probarían el desvío de efedrina a México. Arama y sus colaboradores fueron formalizados por desvío de precursores químicos y no pudieron explicar la presencia de tal cantidad de efedrina en el laboratorio.

La efedrina es un compuesto vital para elaboración de otras poderosas drogas como el éxtasis. De acuerdo a fuentes del mercado farmacéutico nacional que piden reserva de sus nombres, lo habitual es que se importen, al año, no más de 250 a 300 kilos de efedrina al país. Ello, porque cada vez hay menos drogas con efedrina e incluso está controlada en muchos lados.

Por eso que la cifra de 1.100 kilos y la vinculación de Arama al caso abrieron enormes dudas en el sector farmacéutico chileno.

Contacto en Munich

Pero ¿cuál es la vinculación de Cruz Verde en esta historia? Curiosamente es una conexión inicial a través de una de las empresas que integran el holding de la familia Harding. Durante el proceso judicial por el decomiso de efedrina los inculpados revelaron que el primer paso fue la compra de la cantidad de efedrina a la Droguería Munich y de ahí hacer el traspaso a Arama.. Laboratorios Munnich Pharma Medical –también conocido como Droguerías Munich- es parte del holding Cruz Verde y en su directorio se repiten los nombres de integrantes de los directorios de Socofar (la distribuidora de medicamentos) y Farmacias Cruz Verde. Es decir, está ligado a la familia Harding.

Pero la respuesta que hasta ahora no ha sido respondida es ¿para qué Droguería Munich compró esta cantidad de efedrina y de cuánto dispone actualmente? “Esto no tiene sentido. Lo máximo que se ocupa de efedrina en Chile es más o menos 200 a 250 kilos al año. Una importación de una tonelada es anómala”, comenta una fuente ligada al mercado farmacéutico.

Hasta el momento, no ha habido detenidos relacionados con Droguerías Munich, pero en mercado no se descarta que pueda llegar la indagación próximamente a esta cadena y salpicar a Guillermo Harding.

Harding, Arama y el lobbysta

Esta familia que ha tenido en los últimos 15 años una relación “amor-odio” con Fasa y su presidente José Codner, partió en la Quinta Región. El negocio inicial fue precisamente Droguería Munich, aunque luego la matriz pasó a ser Socofar, el holding que se encarga de la distribución de medicamentos para Cruz Verde. A estos negocios integraron al laboratorio Mintlab y en su momento una cadena más pequeña de farmacias (Farmax).

También en el sector farmacéutica es conocida la amistad de los Harding con el laboratorio Arama. Fuentes ligadas a los laboratorios cuentan que durante los años 90, Arama intentó integrarse al selecto grupo de la Asociación de Industriales de Laboratorios Farmacéuticos (Asilfa), que reúne a compañías nacionales. Sin embargo, la comisión de expertos que concurrió a revisar la calidad y procesos de esta compañía –antes de que comenzaran a regir las normas Buenas Prácticas de Manufactura (GMP por sus siglas en inglés)- determinaron que sus condiciones no eran aptas para ser integrado debido a sus falencias técnicas.

Sin embargo, a poco andar comenzó un lobby para que se le diera una “segunda oportunidad” a Arama. Según fuentes ligadas a Asilfa, uno de los principales lobbystas habría sido ni más ni menos que el propio Guillermo Harding.

Hoy, enfrentado a dos potenciales conflictos que podrían destruir la imagen de la familia y de la compañía, Cruz Verde está siendo asesorada por el lobbysta y ex ministro de la concertación Enrique Correa, un hombre que en su minuto también trabajó como lobbysta de Asilfa, así como de otras empresas como Soprole, Habitat, Citibank, Corpora Tres Montes y algunas tabacaleras. Según ha trascendido, el principal rol de Correa a través de su empresa Imaginacción sería desactivar lo más posible ambos conflictos y tratar de separar el caso de la efedrina de Cruz Verde.

Munich y los sumarios sanitarios cursados por el ISP.>/strong>

Pero esta vinculación al caso de la efedrina no es el primer problema que atraviesa Droguerías Munich en los últimos meses. El 11 de septiembre del año pasado, el Instituto de Salud Pública (ISP) aplicó una multa de 110 UTM a Guillermo Harding y Cia. Ltda o Droguería Munich Pharma Medical por la distribución de ácido acetil salicílico masticable de 100 mg. con parámetros de dureza inferiores al mínimo (se deshacía al sacarse de los blíster o envases) y que, además, presentaban ácido salicílico libre excediendo el máximo permitido.

Del mismo modo, a comienzos de este año (el 26 de enero), el ISP emitió una sentencia aplicando una nueva multa a Droguerías Munich. En este caso, se trataba de graves anomalías detectadas en agosto del año pasado en la ciclofosmamida de 1000 mg., un producto clave para pacientes con cáncer. De acuerdo al informe del Instituto de Salud Pública se detectaron problemas severos de disolución y, además, deficiencias en las tapas que tenían problemas de hermeticidad. A raíz de estas faltas, se les aplicó una multa de 250 UTM.

Fuente: El Mostrador.cl

2 comentarios:

shinzon dijo...

Hum, grave la cosa, quiza por eso muestro datamed andaba husmeando cuando salio el primer reportaje.

Ya me lo imaginaba, y por alli espectros me revelaron que se comentaba bajo la tierra.

shizon dijo...

Una vez me acuerdo hace ya tiempo como salio una carta de un profesor de la chile que hacia clases de legislacion farmaceutica. Hablaba de cierta entrevista a la directora del isp, si recuerdo bien salio en las ultimas noticas o quiza la tercera
Mirad atentamente lo que dice, la foto no es muy buena pero se lee

http://img23.imageshack.us/img23/5500/imagen001t.jpg